Fijaos, hoy mismo he encontrado este vídeo en la red y me fascina el trabajo y proceso que se sigue para lograr esa gran calidad y tamaño que vemos en las uvas que podemos comprar en los mercados.
Os indico a continuación más sobre esto.
Resulta que muchos agricultores, para conseguir racimos más gordos y uniformes, realizan pequeños cortes selectivos en aquellos granos que se quedan más pequeños o débiles. La idea es sencilla pero muy efectiva: al eliminar las uvas que no van a desarrollarse bien, la planta concentra sus recursos en las que sí tienen potencial para engordar más, y el resultado son racimos más equilibrados, de mejor tamaño y visualmente más atractivos.
Además de esto, hay otra técnica que me ha parecido súper curiosa: cubrir el racimo con una bolsa protectora. Estas bolsas sirven para evitar que los pájaros picoteen la fruta y también para reducir el riesgo de infecciones por hongos, sobre todo en zonas donde la humedad aprieta. Este es un método muy común en algunos países y, por lo que se ve, contribuye muchísimo a mantener la calidad de las uva hasta el momento de la cosecha.
La verdad es que todo el proceso es casi quirúrgico y nunca me había planteado hasta qué punto se llega a mimar cada racimo para lograr que lleguen en tan buenas condiciones al mercado.
¿Conocíais estas técnicas? ¿Habéis trabajado en viñedos o habéis visto esto de cerca? Me encantaría leer vuestras experiencias.
Os indico a continuación más sobre esto.
Resulta que muchos agricultores, para conseguir racimos más gordos y uniformes, realizan pequeños cortes selectivos en aquellos granos que se quedan más pequeños o débiles. La idea es sencilla pero muy efectiva: al eliminar las uvas que no van a desarrollarse bien, la planta concentra sus recursos en las que sí tienen potencial para engordar más, y el resultado son racimos más equilibrados, de mejor tamaño y visualmente más atractivos.
Además de esto, hay otra técnica que me ha parecido súper curiosa: cubrir el racimo con una bolsa protectora. Estas bolsas sirven para evitar que los pájaros picoteen la fruta y también para reducir el riesgo de infecciones por hongos, sobre todo en zonas donde la humedad aprieta. Este es un método muy común en algunos países y, por lo que se ve, contribuye muchísimo a mantener la calidad de las uva hasta el momento de la cosecha.
La verdad es que todo el proceso es casi quirúrgico y nunca me había planteado hasta qué punto se llega a mimar cada racimo para lograr que lleguen en tan buenas condiciones al mercado.
¿Conocíais estas técnicas? ¿Habéis trabajado en viñedos o habéis visto esto de cerca? Me encantaría leer vuestras experiencias.